El erizo Diadema antillarum, que hace parte de la famillas de los equinodermos como las estrellas o los pepinos de mar, se encuentra en ambos lados del Océano Atlántico. Esta también conocido como eriza, ericera, erizo de lima, o erizo de púas largas. Puede tener entre 2 y 12 cm de diámetro y lleva un color negro con púas finas, fácilmente divisibles y móviles.
Está presente en Canarias desde hace miles de años, formando el ecosistema denominado blanquizal, sin embargo el uso descontrolado del medio marino (vertidos, sobrepesca y reducción de zonas de cría tales como los sebadales) ha provocado un desequilibrio ecológico, dando lugar a la explosión demográfica de las erizas, convirtiéndolas así en uno de los principales problemas de los fondos de Canarias.
Este erizo de mar es preferentemente herbívoro pero puede transformarse en terrible depredador omnívoro según lo recursos alimentarios disponibles. Tiene una boca con 5 dientes en la parte posterior de su caparazón y puede comer de todo: algas, esponjas, pero también materias orgánicas y detritos.
Si el erizo esta sorprendido por el amanecer y que se encuentra en un fondo areno, se agrupa como lo hacían las tropas romanas en la Antigüedad clásica. Forman bloques de erizo, impenetrables y resistentes al oleaje. Cuando nos acercamos a medio metro de distancia, el erizo de mar define la presencia de los buceadores gracias a sensores fotosensibles, y responde a cada cambio de luz por una danza frenética de sus espinas como advertencia.
El mismo fenómeno se produce cuando un depredador se acerca de ellos. Un erizo puede huir a toda velocidad cuando una estrella de mar pasa a su alcance. Poco se sabe de los depredadores canarios del erizo Diadema. Sus púas largas, la forma redonda de su cuerpo, su modo de vida nocturna, hacen que son pocos los que pueden aprovecharse de ellos. En Canarias, no hay una sola especie que puede regular su repartición, sino un conjunto de varias especies. La desaparición de los depredadores naturales del erizo es una razón de su proliferación en nuestras costas.
De la cantidad de comida disponible depende el tamaño del erizo. Si hay muchos nutrimentos disponibles, el tamaño es el más grande (diámetro vertical de 10 /12 cm) y este tamaño se va reduciendo proporcionalmente con la rarefacción de nutrimento. Pero eso no significa que el número de erizo baja, todo lo contrario. Con más nutrimento, son más grandes y poco numerosos, pero con poco nutrimento, el número de erizos por metro cuadrado aumenta.
No se puede diferenciar los machos de las hembras. El erizo se reproduce a lo largo del año, aunque aparece un pico de reproducción en Canarias al momento de la primavera. La fecundación esta coordinada por la luna llena y se hace en el agua. Las larvas planctónicas pueden derivar unos dos meses antes de tocar fondo y transformarse en “erizotito”.
Los erizos se desplazan sobre cualquier soporte, incluso paredes verticales o fondo arenoso. De día, parecen inmóviles pero son muy activos durante la noche.
Diadema antillarum es una especie que forma amplios grupos en fondos rocosos, buscando refugio en las cuevas y grietas. Esto les protege no solamente de los depredadores sino también de los movimientos de agua. Un erizo que vuelca es una oportunidad para un tamboril o una vieja… Estudios han permitidos confirmar que el especie se puede desplazarse hasta 6 m de distancia de su cuevita y que suele volver allí después de la noche.
Este aumento desmesurado del número de erizos es un síntoma del desequilibrio ecológico, no el causante, por lo que las acciones que se proyectan para reestablecer el equilibrio deben afectar a todos los factores que provocan esa situación.
Este exceso poblacional de erizos ha provocado la eliminación de la cubierta de organismos que recubren la mayoría de los fondos rocosos litorales, lo que supone pérdidas de biodiversidad, productividad, zonas de refugio y alimentación y zonas de reproducción y cría.
No hay comentarios:
Publicar un comentario